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¿Qué debo tomar en cuenta antes de vacunar a mi mascotas?

  • MV. Daicy Dominguez
  • 14 sept 2017
  • 3 Min. de lectura

Existen ciertas cosas de debes tomar en cuenta antes de tomar la decisión iniciar con la Las vacunas varían según la edad del perro, pero debemos considerar algunos aspectos:

  • Estado general de salud: Todo animalito que vaya a iniciar su programa de vacunación requiere de un examen físico para determinar su nivel de nutrición, si se encuentran enfermos o no ya que de ser así no deben ser vacunados.

  • Si aún está lactando: si el cachorro aún está lactando debemos esperar dos semanas aproximadamente después del destete para iniciar con las vacunas porque así evitamos que los anticuerpos de la vacuna y las defensas transmitidas por la leche materna se anulen entre ambas, dejando al cachorrito sin protección.

  • Vacunas y desparasitaciones al día de la madre: Si la madre está correctamente vacunada y desparasitada tendrá un buen estado inmunitario lo que garantiza la transmisión de buenas defensas a nuestros cachorros.

  • Control de parásitos previamente: Es importante la desparasitación tanto interna como externa antes de recibir vacunas porque así estamos seguros de que nuestras mascotas están bien y que las vacunas serán más seguras y no fallaran.



¿A qué edad debo vacunar a mi mascota?


La mayoría de los cachorros están protegidos por las defensas transmitidas por la madre a través de la leche durante las primeras semanas de vida, las cuales irán disminuyendo hacia las 8-12 semanas de edad. Desafortunadamente en nuestro medio debido a la venta indiscriminada de cachorros y a la falta de conocimiento por parte de los dueños, no todos los cachorros cumplen con el periodo de lactancia recomendado, además de ello en muchas ocasiones los padres carecen de vacunas o tienen vacunas incompletas por lo que estos cachorritos están desprotegidos. Por lo tanto, la recomendación es iniciar la vacunación básica a las 6-8 semanas de edad, luego repetir cada 2-4 semanas hasta las 16 semanas de edad o más. En nuestro caso iniciamos la vacunación a partir del mes y medio.


*Calendario referencial. Puede variar.

Calendario referencial. Varía en cada centro médico.

Plan de vacunación


El plan de vacunación que llevará nuestra mascota será determinado por el médico veterinario de acuerdo a la información brindada por los propietarios. Nuestro plan de vacunación para un cachorro menor a 3 meses consiste en un total de cinco vacunas colocadas en un intervalo de cada 15 días iniciando con una vacuna Parvovirus, luego una Triple canina (Distemper, Hepatitis y Leptospira), un primer refuerzo contra Parvovirus, un segundo refuerzo (Triple canina) y finalmente una vacuna Sextuple (Distemper, Hepatitis, Parvovirus, Parainfluenza, Complejo Respiratorio y Leptospira) y la Antirrabica.Si nuestro cachorro tiene más de 3 meses o es un perro adulto sin vacunas se les inmuniza contra un mayor número de enfermedades recibiendo en total 3 vacunas séxtuples (una por cada mes) además de la vacuna Antirrábica. De allí en adelante a criterio del médico veterinario los refuerzos anuales correspondientes.


Cuidados durante el periodo de vacunación

Cuando los cachorros inician un programa de vacunación recién estarán creando defensas y por sí mismos no están preparados para hacerle frente a las enfermedades.

Debido a esto debes tenerlo en casa hasta que haya recibido todas las vacunas y esté completamente protegido porque al sacarlo y ponerlo al contacto con otros perros, o lugares frecuentados por otras mascotas, estará expuesto a enfermedades y por el momento no está protegido. Tu veterinario te recomendará cual es el momento adecuado para que tu perro pueda entrar en contacto con el mundo exterior, para que socialice, se acostumbre a la gente y al ruido de la calle, mientras tanto debe permanecer en casa o a lo mucho pasearlo en brazos.


Reacciones frente a las vacunas


Las reacciones adversas suelen manifestarse durante los tres días posteriores a la

administración de la vacuna, lo más común es fiebre, dolores, comezón o alergias (abultamiento de la zona donde se aplica la vacuna, hinchazón de orejas, hocico o párpados), decaimiento y pérdida del apetito. Éstos son síntomas leves, aunque es mejor que el veterinario los examine y administre los medicamentos correspondientes para acabar con ellos. El efecto secundario más grave es la anafilaxia, una reacción adversa que se origina en el organismo para defenderse de la vacuna (más reactiva es la vacuna contra la rabia) destruyendo los glóbulos rojos, lo que puede ocasionar dificultades respiratorias, estado de shock, paro cardíaco, e incluso la muerte. Sin embargo, son muy pocos los perros que sufren este problema siendo los perros jóvenes los más propensos, así como las razas pequeñas.


 
 
 

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