ESTRÉS FELINO

Este término expresa todas aquellas condiciones molestas (usualmente se refiere a una experiencia de corta duración) a las que se exponen nuestros gatos y que tienen efectos negativos. Algunos gatos gestionan muy bien el estrés, pero para otros supone un problema de salud que debe ser tratado lo antes posible. Por ello es importante tener en cuenta de que los gatos no deben ser tratados como una mascota canina pues es una especie muy especial.

1. CAUSAS DE ESTRÉS EN UN GATO

a) Cambios en el entorno. Los gatos son animales territoriales y rutinarios por lo que marcan su territorio mediante feromonas ya que el control del espacio es vital para ellos. Si hay algún cambio en su lugar de confort (salidas breves de casa, ausencia de su dueño, ruidos fuertes, un viaje demasiado largo, una mudanza, la soledad o el hecho de limpiar los muebles) hace que el gato no se siente a gusto y todo ello va a generar un estado de alerta que si no se controla degenerará en un estrés permanente y perjudicial.

b) Mala relación con los miembros de casa: Si nuestro gato está acostumbrado a estar solo verse constantemente acosado por otro habitante de la casa, independientemente de la especie de la que se trate (otro gato, perros, niños, etc.), puede llevarlo a un estado de alerta constante. Hay que tener en cuenta la edad de nuestro felino y lo tolerante que puede ser ante la presencia de un acompañante; puede ser que se lleven perfectamente, pero también puede verlo como una amenaza y que peleen constantemente.

c) Hacinamiento: Frecuente en lugares donde conviven muchos animales, como son los albergues. Normalmente los gatos se mantienen en un perfecto equilibrio propio pero cuando este equilibrio se rompe aparecen las agresiones territoriales, los acosos, los marcajes inadecuados, es decir, el estrés se instala en el grupo y amenaza a cada ejemplar que habita en ella.

d) Aburrimiento: En muchas de las casas con gato existe una falta de motivación que hace que el animal se aburra y desarrolle un estado de ansiedad que acabe en estrés. De hecho el enriquecimiento ambiental es una constante en casi todos los tratamientos por ansiedad, hiperactividad y estrés.

2. CONSECUENCIAS DEL ESTRÉS

Debemos ser observadores para poder identificar los comportamientos que muestren cambios de conducta en nuestros gatos.

a) Enfermedades reiteradas: Las hormonas que se liberan durante el estrés interfieren en la adecuada función de los células de defensa por lo tanto ocasiona que el sistema inmunológico de los gatos deje de responder correctamente siendo más susceptibles a las enfermedades infecciosas.

b) Aumento de la agresividad: Un cambio súbito en el comportamiento en los gatos estresados puede manifestarse como agresividad. En este caso los gatos bufan, muerde, araña, eriza el pelo, mantiene dilatadas las pupilas y una mirada fija.

c) Aumento de la ansiedad: La ansiedad es quizás uno de los signos más indicativos de estrés en los gatos. En este caso los gatitos tendrán comportamientos compulsivos como lamidos excesivos, ingesta de alimentos no comestibles.

c) Trastornos alimentarios: El estrés afecta directamente sobre los hábitos alimenticios. Un gato con estrés puede perder por completo el apetito e incluso llegar a presentar malnutrición, otra conducta que podemos apreciar en un gato estresado es la de comer compulsivamente y no tolerar bien la comida, vomitando finalmente.

e) Marcaje: Un gato estresado siente que ha perdido por completo el control sobre su entorno y hará todo lo posible por recuperarlo por lo que empezara a marcar paredes y muebles. Este marcaje se produce en forma de arañazos u orina.

3. ALIVIANDO EL ESTRÉS:

a) Lugar de retiro: Los momentos de relajación son imprescindibles para calmar la ansiedad de nuestra mascota sobre todo si hay una situación ruidosa en casa, para ello debemos tener un ambiente tranquilo y diseñado para que el gato pueda sentirse seguro, esconderse, y hacer sus necesidades en un ambiente adecuado.

b) Juguetes: En cualquier caso el juego ayuda a liberar energía, a mantener la mente ocupada y contar con su juguete favorito en los momentos de ansiedad le ayudará a centrarse solo en ese objeto. Cuando creas que va a vivir un momento de estrés ponle algún juguete le ayudará a sentirse más seguro.

c) Rascadores: No solo les ayudan a afilar sus uñas, son un buen objeto desestresante ya que este producto le brinda sensación de placer.

d) Transportadores: Nos permitirá llevar a nuestras mascotas al veterinario o a realizar viajes, es recomendable que se coloque en su interior una tela o cojín sobre la que duerme el gato normalmente o una prenda que contenga el aroma del dueño, también puede cubrir el transportador con una manta o toalla para mantener al gato relajado.